lunes, 4 de noviembre de 2019

Sinécdoque, Valencia (II)


Sin más preámbulos, procedo a presentaros las otras quince fotografías de mi selección sobre detalles de monumentos, museos, iglesias y jardines de Valencia, en esta entrada que podría haberse llamado perfectamente La Parte por el Todo; el título es aplicable no solo a los encuadres concretos de cada edificio en particular, sino también al conjunto de los treinta lugares escogidos, que no deja de ser más que una pequeña muestra de los muchos rincones agradables de la ciudad en los que paseando me siento como en mi propia casa… Espero haber demostrado con estas fotos que si no miras hacia arriba de vez en cuando al andar por sus calles te estás perdiendo una gran parte del encanto de Valencia.


Vidriera del techo del Edificio de Correos de Valencia



Catedral y estructura de la Virgen de los Desamparados en la Ofrena de las Fallas de Valencia



Estatua ecuestre de Jaume I en el Parterre de Valencia



Torre de la Iglesia del Carmen en Valencia



Araña de cristal en el edificio de las Cortes Valencianas



Fachada del Ayuntamiento de Valencia iluminada por focos rojos y azules



Estatua de una religiosa enmarcada por la sombra de una palmera, en el Monasterio de la Trinidad de Valencia



Fachada de la Lonja de Valencia, en contrapicado y con una farola de fundición en primer plano



Detalle de la fachada del Mercado de Colón, con el escudo de la ciudad de Valencia



Relieve con el plano de la ciudad de Valentia en tiempos romanos, en el Museo de l'Almoina



Patio del Embajador Vich en el Museo de Bellas Artes San Pío V de Valencia



Iglesia del Temple de Valencia vista desde el antiguo cauce del Río Turia



Interior del Ágora solapado con el reflejo del Puente de l'Assut de l'Or, en la Ciudad de las Ciencias y las Artes de Valencia



Detalle de las pinturas del techo de la Iglesia de San Nicolás, en Valencia



Almenas de las Torres de Quart con la bandera de Valencia al viento, vistas a través de unas ramas


2 comentarios:

Susana Mar dijo...

Se percibe perfectamente el cariño que tienes a tu ciudad. Ser "guiri" en tu propia ciudad no nada fácil!!, La cotidianidad hace que no nos fijemos en los detalles y la belleza de las cosas que nos rodean... Bravo!!

Kalonauta dijo...


Estoy de acuerdo contigo, Susana... Al pasear por la ciudad hay que intentar hacer un esfuerzo consciente por contemplarla con la mirada virgen y superar el prejuicio de que ya lo tienes todo visto, porque no es así; cada vez que recorres el mismo rincón descubres cosas nuevas de las que no te habías percatado antes... Solo de este modo se puede llegar a disfrutar al máximo de ella. Yo no me canso de patear sus calles, igual que no me canso de agradecerte tus amables contribuciones en el blog. ¡Eres un solete! ¡Besos, nos vemos! 😁